Waterpolo, también conocido como polo acuático, es el nombre de un deporte que se juega en una piscina. En este deporte se enfrentan dos equipos cuyo objetivo consiste en marcar la mayor cantidad de goles en la portería contraria. Un partido de waterpolo se divide en cuatro periodos de ocho minutos, teniendo una duración final de poco más de media hora.
Cada equipo de waterpolo se conforma por 6 jugadores de campo y un portero, los equipos se diferencian por el color del gorro que visten. Durante el partido, los jugadores tienen prohibido pisar el fondo de la piscina, aunque esta suele ser tan profunda que no llega a pasar. De esta forma, los jugadores deben permanecer a flote durante todo el partido consumiendo bastante energía.
En 1877, el escocés William Wilson estableció de forma escrita las primeras reglas básicas del juego al que llamó waterpolo. A medida que fue pasando el tiempo, el juego fue desarrollándose poco a poco en Europa. En 1900 se jugó por vez primera en las olimpiadas de París, y en donde el Reino Unido se llevó la medalla de oro. En 1908 se crearon las reglas internacionales de waterpolo continuando así su propagación por todo el mundo.
Las reglas básicas que toda persona debe saber si desea practicar este deporte, son las siguientes: los jugadores solo pueden tomar el balón con una sola mano. Los jugadores no pueden hundir la pelota en el agua cuando se encuentre en juego. Está prohibido apoyarse de los bordes de la piscina cuando se esté jugando, ni tocar el fondo de la misma. Los árbitros deben estar fuera del agua y en los laterales de la piscina.
















